Hoy os traigo la reseña de este libro de Aita Castaño (ilustrado por Alfonso Zapico) que es una auténtica joya.
Sinopsis
Eran las madres, abuelas, tías, hermanas, vecinas, amantes y esposas de todos los niños de humo que nacieron, se criaron y murieron con las cuencas mineras metidas en el corazón.
Las carboneras son las herederas de una tradición minera que guarda para ellas un escondido rincón del que pocas veces se las saca para recordar que existieron. Y sus vidas están llenas de llantos, de amores y de historias. En Carboneras Aitana Castaño narra, en una historia de historias, la vida de aquellas mujeres que lo dieron todo por la vida y por sus ideales.
El espacio en el que se localiza es Montecorvo del Camino (un lugar ficticio del universo que Alfonso Zapico dibujó y creó para contar la Revolución del 34 en su trilogía La Balada del Norte), en algún momento de los años sesenta, cuando a todas las batallas de estas mujeres también había que sumar la de una clase dirigente represora que no dudó en hacer de las comarcas carboníferas uno de sus laboratorios de torturas.
Opinión personal
Tenía muchas ganas de leer el nuevo libro de Aitana porque "Los niños de humo" fue un auténtico descubrimiento en todos los aspectos. Esta nueva obra me ha vuelto a enamorar. Se trata de cuentos breves (algunos más que otros) acompañado de unas maravillosas ilustraciones de Alfonso Zapico. Este libro es de las mujeres de la cuenca minera, que tanto lucharon al lado de sus maridos, hijos, vecinos, hermanos y como ellas fueron y son un pilar fundamental en la lucha obrera.
No voy a entrar en el argumento de cada cuento porque destriparía lo más importante, pero si que quiero destacar que a diferencia de su otra obra, en esta los cuentos están relacionados entre sí, puesto que nos va contando la vida de diferentes mujeres de un pueblo y, al final, eres capaz de hacerte una idea del pueblo en conjunto, de su unidad y su apoyo y de la importancia de cada figura. La idea de pueblo, en su conjunto, aquí toma forma. Sin unos, los otros no vivirían.
El lenguaje que usa para narrar estos cuentos es brillante. A veces te enamora y a veces te hiela el alma. La crudeza que narra de una manera casi casual nos hace ver que vidas más perras tenían nuestras vecinas.
Me ha gustado mucho cada personaje, cada historia y sobre todo lo que no se dice, es decir, la historia que hay tras la historia, lo que el lector se imagina. Además al final del libro hay un "albúm" de fotos de los personajes, bellísimas ilustraciones. ¡Importante! No lo veáis hasta el final porque puede haber algún spoiler.
Ha sido una de esas lecturas que da mucha pena terminar porque acabas formando parte de sus hojas. Os la recomiendo absolutamente.
¿La habéis leído?